En una audiencia pública que duró 9 horas y que contó con la asistencia de 1.600 personas aproximadamente y 342 inscritos para intervenir o entregar ponencias, los habitantes de los municipios de Morelia, Milán y Valparaíso (Caquetá), se pronunciaron sobre la solicitud de licencia ambiental realizada por Emerald Energy PLC para el proyecto “Área de Perforación Exploratoria Nogal”.
Las intervenciones versaron sobre diversos temas que van desde el impacto ambiental del proyecto, el uso del agua y los programas de compensación hasta la inversión social, la política de empleo local y el uso y mantenimiento de la malla vial terciaria.
El equipo de la ANLA estuvo encabezado por el Subdirector de Evaluación y Seguimiento, Guillermo Alberto Acevedo Mantilla, la experta en audiencias públicas Martha Camacho y la abogada Sara Natalia Orozco, quienes contaron con el apoyo en la mesa técnica de Alba Lucía Fonseca y María del Pilar Castillo.
A este encuentro de participación ciudadana asistieron comunidades de 21 veredas ubicadas en el área de influencia del proyecto, autoridades locales y regionales, organismos de control, empresarios del turismo y ganaderos, entre otros.
Emerald Energy PLC Sucursal Colombia radicó la solicitud de la licencia ambiental en abril de 2017. Luego, un grupo de más de 100 personas pidió a la ANLA convocar una audiencia pública para expresar sus preocupaciones frente a los impactos de una futura exploración petrolera en la región.
La entidad, tras analizar la petición, la convocó para el 15 de marzo. Previamente, se realizó la reunión informativa en la que se escuchó a la comunidad y se les explicó por parte de la empresa las características del proyecto.
En ese momento se escucharon inquietudes relacionadas con el uso del agua, tanto superficial como subterránea; el posible desplazamiento de fauna; los programas de compensación ambiental; la inversión social por parte de la compañía; y la utilización de las vías de acceso a las plataformas.
Igualmente hubo planteamientos relacionados con los vertimientos de aguas residuales; la vinculación de la mano de obra local, tanto la calificada como la no calificada; la compra de servicios a empresas y establecimientos de la región; el inventario biológico; la promoción de proyectos productivos; y los efectos en los ecosistemas en el mediano y largo plazo.
Durante la audiencia pública, hubo una participación activa de las comunidades indígenas del departamento del Caquetá, quienes consideran que en esa región no debe existir industria extractiva, pues hace parte de la Amazonía.
La ANLA continúa promoviendo los diferentes mecanismos de participación ciudadana. En solo audiencias públicas, este año se han realizado tres: la de Hidroituango, en Santa Fe de Antioquia; la del terminal marítimo COMPAS, en Cartagena; y esta, que tuvo lugar en el Coliseo Cubierto del barrio La Alameda, de Morelia.