El equipo técnico y jurídico de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales -ANLA-, estará presente este viernes en Ataco (Tolima), para atender las inquietudes de la comunidad, la administración local y regional, los organismos de control, ONGs y población en general sobre la solicitud para el otorgamiento o no de la licencia ambiental orientada a la explotación de oro en jurisdicción de este municipio.
Previamente, el 23 de junio pasado, se realizó la reunión informativa en la que asistieron aproximadamente 120 personas y en la que se abordaron diversos temas que tienen que ver con el impacto ambiental del proyecto aurífero.
“En la audiencia pública, que es un mecanismo de participación ciudadana, vamos a escuchar las quejas, propuestas y sugerencias de la población que se inscribió y a recibir las ponencias de los diferentes actores con el fin de fortalecer los elementos de juicio frente al acto administrativo que se expedirá luego”, dijo la directora de la ANLA, Claudia Victoria González Hernández.
La licencia ambiental fue solicitada por la Compañía Minera de Ataco S.A.S, pero la Corporación Autónoma Regional del Tolima (Cortolima) pidió la audiencia pública, la cual fue convocada para este 14 de julio.
El proyecto está situado en la vereda Apone, pero varias comunidades ubicadas en la zona de influencia han manifestado su inquietud por los efectos ambientales que se pueden derivar de su explotación.
Durante la reunión informativa, Oscar Javier Quesada, director de explotación de la compañía, quien expuso los principales puntos del Estudio de Impacto Ambiental (EIA), dijo que el proyecto ha sido socializado con la comunidad a través de 30 reuniones y publicaciones en medios de comunicación virtuales e impresos.
El ejecutivo explicó, en ese momento, que el título minero 4974 abarca 115,67 hectáreas, un área de explotación de 25,84 hectáreas y 89,83 hectáreas sin explotar. De los 25 predios que tiene Apone sólo se intervendrían dos: El Triunfo y Parasal, afirmó.
Según la exposición hecha por la firma, el proyecto no intervendrá el cauce del río Saldaña, pues la explotación se hará en una poza cerrada. Durante la explotación, agregó, no se usará mercurio ni otra sustancia química.
Sin embargo, los campesinos y, sobre todo la comunidad indígena, se oponen al proyecto, tras indicar que se afectarán los ecosistemas y se contaminaría el agua, que luego llega a Saldaña y posteriormente al río Magdalena.
En inmediaciones del municipio de Ataco, ubicado a 153 kilómetros de Ibagué, se practica la minería de oro de manera informal, por lo que una parte de la población está dividida frente al nuevo proyecto, que lo considera más viable que el método actual.
La audiencia estará presida por el Subdirector de Evaluación y Seguimiento de la ANLA, Guillermo Alberto Acevedo Mantilla, y con él estará un equipo técnico de la entidad, con experiencia en este de tipo de mecanismos de participación ciudadana.
Esta es la quinta audiencia pública autorizada por la ANLA en el presente año, pues ya han tenido lugar la de Termopaipa, Unidad Funcional I Villavicencio-Cumaral, mina de caliza La Esmeralda (San Luis, Tolima) y Rubiales, en Casanare