El sitio de disposición final de residuos sólidos “el Carrasco” operado por las Empresa Municipal de Aseo de Bucaramanga (EMAB) S.A, E.S.P., fue objeto de seguimiento por parte de la ANLA a través del mecanismo de oralidad. En la diligencia la ANLA hizo 30 requerimientos a la EMAB.

El más reciente seguimiento ambiental al proyecto corresponde a las visitas realizadas por el equipo técnico de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) los días 28 de marzo y 25 y 26 de junio de 2019 y está relacionado con la etapa de desmantelamiento y abandono.

En la audiencia de seguimiento, la ANLA hizo 30 requerimientos de los medios físico, biótico y socioeconómico, algunos de ellos reiterados, donde se evidenció el incumplimiento de las obligaciones consignadas en los diferentes actos administrativos emitidos por esta Autoridad.

Entre los requerimientos más críticos están los relacionados con el medio físico que comprenden el manejo de saturación de lixiviados, que de acuerdo con la ANLA, a la fecha se desconocen las medidas que de carácter urgente, fueron solicitadas a la Empresa Municipal de Aseo de Bucaramanga (EMAB) para remediar los afloramientos, fugas, vertimientos irregulares y la capacidad insuficiente evidenciada de almacenamiento de estas sustancias.

La ANLA tampoco encontró los registros dentro del Plan de Manejo Ambiental (PMA) de 2014 de mediciones de la calidad del aire que analicen el material particulado (PM10), los monitoreos de sedimentos acumulados de materiales como plomo, fenoles y mercurio (Hg) en la quebrada El Carrasco, entre otros.

Otra de las solicitudes hechas a la EMAB, es “la presentación de los planos récord con la localización del sistema para el manejo de gases y aguas lluvias de toda el área de disposición El Carrasco”, que, como en requerimientos anteriores, no se encontraron en los informes mensuales del PMA de los años 2017 y 2018, y los cuales son fundamentales para el seguimiento, el conocimiento de la cobertura y ante una contingencia, el saber la localización de las estructuras.

Adicionalmente, se requirió a la empresa “la presentación de los monitoreos de calidad de aguas, teniendo en cuenta la ampliación de la red de monitoreo de aguas superficiales y subterráneas, la ejecución de estos dos veces al año en períodos de invierno”, y además el informar a la entidad sobre su realización para que pueda hacer el seguimiento y acompañamiento.

También, se solicitó a la Empresa Municipal de Aseo de Bucaramanga, informar sobre el estado de sus instrumentos de medición geotécnica, así como la instalación de nuevos mecanismos que permitan analizar las otras celdas de contención. Así mismo, se recalcó a la empresa la importancia de realizar estos monitoreos semanalmente y ser consignados en el próximo Informe de Cumplimiento Ambiental (ICA).

Dentro del listado de requerimientos, y de los que “más preocupa” a las autoridades ambientales, es que la empresa no ha entregado los diseños definitivos para la contención de lixiviados debido a la inestabilidad del terreno que evidenció la visita y las mediciones del equipo técnico de la ANLA. Esta razón es la que lleva a hacer un llamado urgente por parte de la Autoridad Ambiental a la EMAB a que termine uno de los diques y el box culvert, lo que ayudará a mitigar el problema.

Plan de contingencias

A raíz de la evaluación y seguimiento del proyecto por parte del equipo técnico de la ANLA, también se pudo establecer que el Plan de Gestión del Riesgo se debe complementar abarcando el total de actividades que se están realizando. Los profesionales evidenciaron que el nivel de cumplimiento del plan dejó de lado variables muy importantes como la “evaluación cuantitativa de las amenazas derivadas de las actividades operativas hacia el medio ambiente, la realización de un análisis cualitativo y cuantitativo de riesgos y la generación de medidas de prevención y seguimiento a las medidas de los riesgos identificados”, entre otros.

En ese orden de ideas, la EMAB deberá presentar un mapa con la identificación de los elementos expuestos, a la escala más detallada posible, en función del tipo de evento amenazante y en el que se puedan visualizar los elementos afectados.

Requerimientos socioeconómicos

Dentro requerimientos socioeconómicos, se formularon solicitudes como la presentación del seguimiento y trazabilidad de quejas y atención a la comunidad, así como los impactos generados a través de la implementación de medidas acordes con la realidad del proyecto. También se deben documentar las acciones de información y participación desarrolladas con las comunidades aferentes al sitio de disposición final, autoridades municipales y ambientales de la región, en relación con la implementación del plan de manejo desde enero de 2017 a la fecha.

Por último, la EMAB debe complementar la caracterización ambiental para la etapa de desmantelamiento y abandono del sitio de disposición final El Carrasco, presentando de manera ordenada y completa el capítulo de caracterización actualizada a las condiciones reales del predio y su área de influencia, debido a que no se conoce el estado actual del predio El Carrasco. Se hace necesario una caracterización ambiental, de los medios físico, biótico y social, siguiendo lo establecido en la Metodología General de Estudios Ambientales vigente.