Por: Rodrigo Elías Negrete Montes – director general de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales.
La ANLA mantendrá los altos estándares que hoy nos reconocen como una de las mejores entidades del Estado a nivel nacional, con apertura al diálogo permanente con el sector empresarial y demás actores institucionales y sociales.
El 2022 fue un año lleno de expectativas y cambios. Los lineamientos del nuevo gobierno y la ratificación del Acuerdo de Escazú nos llevan a fortalecer los procesos de la entidad y generar un acercamiento mayor, activo y eficaz con las comunidades, de manera de que las decisiones que se adopten por la ANLA respeten los tres ejes fundamentales de dicho Acuerdo: la participación ciudadana, el acceso a la información y la justicia ambiental, removiendo los obstáculos que limitan el acceso a estos derechos.
Dentro de los retos que tenemos en 2023, está fortalecer el rigor técnico en la evaluación de los proyectos, de manera que se realicen con mayor objetividad, calidad, oportunidad, transparencia y rigurosidad, poniendo todo nuestro esfuerzo en potenciar el componente socioeconómico de evaluación, creando lazos más fuertes con las comunidades, de manera que los impactos ambientales se puedan mitigar, prevenir, corregir y compensar.
Así mismo, se fortalecerá el seguimiento ambiental de manera que cumpla con los más altos estándares, con conocimiento más cercano y real de la forma en la que se desarrollan los proyectos, y los impactos que estos generan, fortaleciendo los espacios de participación de manera que esté sea incidente en la toma de decisiones, con el respeto de los derechos de quienes intervienen en los procesos administrativos a cargo de esta entidad.
Es importante resaltar que otro de los retos, para el año que avanza, es darle concreción a la estrategia de presencia territorial y garantizar la presencia permanente de la ANLA en los territorios donde se localicen proyectos, obras o actividades de su competencia.
Para el cumplimiento de los retos trazados resulta necesario la articulación con cada uno de nuestros colaboradores, el Ministerio de Ambiente, las corporaciones autónomas regionales, instituto de investigación científica, entes territoriales, entes de control, gremios, academia y por supuesto, con las comunidades.
Que este 2023 sea el año para fortalecer nuestra misionalidad de manera que aportemos decididamente para consolidar a Colombia cómo una potencia mundial para la vida.