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Espacios de Diálogo Territorial

de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales - ANLA

¿Qué son los espacios de diálogo territorial?

Son espacios de encuentro que buscan facilitar la interlocución y contribuir a la prevención y/o transformación positiva de conflictos ambientales asociados a proyectos, obras o actividades de competencia de la ANLA. Tienen como propósito que las partes se reconozcan como pares y tengan la posibilidad de construir conjuntamente propuestas que contribuyan a identificar e implementar alternativas para la gestión de conflictos ambientales en territorios específicos. Estos diálogos pueden derivar en la articulación de acciones frente a temas comunes y el establecimiento de compromisos entre las partes asociados al manejo del conflicto, sobre los cuales esta Autoridad Ambiental hace seguimiento a su cumplimiento.

¿Cuándo opera un espacio de diálogo territorial?

Los espacios de diálogo territorial tienen lugar en las áreas de influencia donde hay presencia de la Estrategia de Presencia Territorial, y en las cuales se han identificado conflictos relacionados con los proyectos, obras o actividades de la ANLA.

¿Cómo operan los espacios de diálogo territorial?

Los espacios de diálogo territorial se desarrollan a través de cuatro (4) fases que se describen a continuación:

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El objetivo de esta primera fase es aproximarse y entender el conflicto a través de la Estrategia de Presencia Territorial, realizando un análisis del contexto y la identificación y caracterización de los actores relacionados, basado en el uso de fuentes primarias (como entrevistas y conversaciones de primera mano con los involucrados) y secundarias (revisión documental como noticias de los diversos medios de comunicación, y denuncias, peticiones o quejas recibidas por la ANLA).

Estas acciones permiten reconstruir antecedentes, visiones y expectativas que se han generado y se generan en torno al conflicto. A su vez, esta tarea permite establecer sobre qué se trata el conflicto, el contexto, los actores clave y, en general, realizar una valoración inicial sobre el estado del conflicto ambiental sobre el cual se va a desarrollar el espacio de diálogo territorial.

Toda esta información se sistematiza y reposa en el Sistema de Análisis Estratégico para la Transformación de la Conflictividad Ambiental – STC.

Durante esta segunda fase la ANLA se encarga de estructurar el espacio de diálogo territorial, formulando la temática, el alcance, los objetivos de la jornada, la agenda y la estrategia de comunicaciones para su desarrollo. Es decir, esta fase es preparatoria y contiene un enfoque diferencial dependiendo de los actores a convocar.

La implementación de todo espacio de diálogo territorial pasa por dos (2) momentos:

Dar respuesta oportuna en territorio a las denuncias

Preparación o aprestamiento:

conlleva la creación de capacidades en los actores involucrados en el conflicto, la entrega de información, la generación de las condiciones para el desarrollo del diálogo, y la construcción de propuestas para la solución al conflicto desde cada una de las partes por separado, para preparar el momento de encuentro y construcción colectiva.

Brindar pedagogías institucionales

Ejecución:

es la realización del espacio de diálogo territorial como tal, en el cual se busca analizar colectivamente las causas que han generado el conflicto y propiciar la construcción conjunta de propuestas para su solución a partir de las propuestas individuales de cada una de las partes. De este momento resultan conclusiones, acuerdos o consensos entre las partes que propenden por transformar positivamente el conflicto.

Nota: es importante aclarar que los espacios de diálogo territorial no son una instancia decisoria ni vinculante,sino que son espacios de co-construcción que esperan motivar alternativas más amplias para contribuir a la transformación positiva de un conflicto en cuestión.

También es indispensable tener presente que el papel de la ANLA durante los espacios de diálogo territorial es convertirse en el orientador, en la guía y en el aportante de capacidades a todos los actores involucrados, de tal manera que se encuentren preparados para el diálogo. En pocas palabras, la ANLA se constituye en un facilitador del espacio.

En este momento se hace seguimiento a los acuerdos, compromisos o acciones adquiridas por los participantes del espacio de diálogo territorial, con el fin determinar su avance y cumplimiento.


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